Si has sido afortunado de niño habrás pasado tus veranos en el pueblo, pero si no, seguro que has soñado con adoptar un pueblo y pasar allí los veranos, bañarte en el río, disfrutar de sus fiestas...
Y bien es cierto que quien tiene un pueblo tiene un tesoro, y es aquí donde entra el papel del turismo rural. Un turismo cercano y familiar que te hace sentir un poquito más cerca de esos sueños o esos recuerdos de la infancia. Es por ello que cuando practicas turismo rural lo sientes como una experiencia única. Disfruta de todo lo que te ofrece el mundo rural, como cada sorbo de una copa de vino, y no te pierdas nada. Prueba su gastronomía, habla con sus gentes, compra artesanía, mete los pies en el río... piensa que todo ello contribuye al desarrollo sostenible de nuestros pueblos, ayudando a frenar una de las grandes problemáticas del mundo rural como es la despoblación.
Es en el sector turístico donde muchos pueblos han sabido transmitir identidad y construir experiencias enriquecedoras. Así que como decía Henry Miller "nuestro destino de viaje nunca es un lugar, sino una nueva forma de ver las cosas", así que cambia tu punto de vista y la próxima vez que te escapes a un destino rural míralo con otros ojos porque son pequeños paraísos perdidos que tienen mucho que ofrecerte.
"Nuestro destino de viaje nunca es un destino, sino una nueva forma de ver las cosas" Henry Miller
Por eso queremos compartir contigo una nueva mirada para tu próxima escapada rural, aquí van nuestras humildes recomendaciones:
Habla con la gente. Ya sabemos que en los tiempos que corren parece difícil acercarse a alguien y ponerse a charlar. Pero es una de las grandes recompensas del mundo rural, la transmisión oral de las costumbres, los oficios, las recetas... No te vayas sin conocer una receta, sin saber cuando son las fiestas, sin conocer alguna leyenda.
Sal a disfrutar de un atardecer y quédate en silencio, eso que sientes se llama calma, se llama estar a gusto con todo lo que ves. Si tienes ocasión informate de los baños de bosque, una práctica que te ayuda a liberar estres y a conectar con tu lado natural.
Siéntete rural. Siglos de historia nos acompañan, así que sientete a gusto porque estas en un medio inherente a tu condición humana.
Aprovecha para conectar con tu familia o amigos, de hablar, desconectados de la wifi y disfrutar del placer de conversar.
Se solidario con tu entorno, piensa en que hay detrás de cada lugar que visitas, como viven sus gentes, como cuidan sus paisajes, sus oficios, sus tradiciones, y cuidarlos tu también, porque algo de ese viaje seguro que quedará siempre en ti.
Así que la próxima vez que elijas un destino rural se consciente de que habrá alguien pensando en ti, en que seas un poquito más feliz. Aprovechalo y disfruta del turismo rural!
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